martes, 30 de octubre de 2012

Llueve.




Pues eso.

Os dejo un poemilla de Paco Bello, extraído de su poemario “Amor con lobo al fondo”.

Llueve.

Gracias a dios,
llueve
exponencialmente.

Llueve
sin sentido común,
llueve
como tornillos desenroscados.

Aves de otro mundo cruzan el cielo largamente
(qué inverosímiles son siempre los cielos)
y convierten la autopista en una gran serpiente onírica.

Llueve
como un anciano
indeciso
que hace balance
encerrado en el cuarto de baño
de una casa
esquinada de recuerdos.

Llueve a pecho descubierto.

Llueve
como si dios nos amara
y odiara
a partes iguales.

Y gracias a esta lluvia
consigo que esta muerte
parezca la vida.


viernes, 12 de octubre de 2012

Un angelo disteso al sole.




Menos mal que hoy es fiesta, porque me he pasado toda la mañana escuchando la canción (en italiano y en español) y viendo el vídeo que me encanta (y eso que nos han tenido locos a todos los fans, porque al poco de subirlo a Youtube, lo bloquearon).



Por cierto, como curiosidad diré que el vídeo se rodó en Madrid hace un par de semanas.

Y ahora, a esperar al 13 de Noviembre. Mientras seguiré escuchando y cantando eso de…

“Quién eres tú,
es tan difícil describirte,
un ángel como el Sol tú eres
que ha caído aquí…”



miércoles, 10 de octubre de 2012

Próximamente...





El 13 de noviembre verá la luz el nuevo trabajo de ErosRamazzotti:



Ya han pasado tres años desde “Alas y Raíces”, y aunque la espera se hizo más corta gracias a “21.00: Eros Live World Tour 2009/2010” y a un recopilatorio con el tema inédito en colaboración con Giorgia “Inevitabile”, la verdad es que para los fans, estos periodos se nos hacen eternos.

El viernes se estrenará el primer single “Un angelo disteso al sole” (el título de la versión española ha quedado un poco raro), para hacernos la espera un poquito más llevadera.

Nos esperan catorce nuevas canciones, una pasada :)))

Y aquí estoy, contando los minutos...


domingo, 7 de octubre de 2012

¿Jefa yo?




Me he pasado los últimos cuatro años amenazando a mis alumnos con mandarlos al despacho. Bueno, para ser sincera, el último año  muy poquito, que tenía unos niños estupendos.

Pero los tres anteriores, con mi Barsinson, mi J y mis otros regalitos, me harté de repetir que los iba a mandar a Dirección. De hecho, los llevé varias veces, para hacer el paripé, más que nada, porque la verdad es que allí, aparte de un discursito en plan serio y alguna que otra amenaza, poco más se sacaba.

Ahora la Jefa soy yo y ya me han mandado al despacho a cinco de mis niños.

Joé, no me voy a librar de ellos en la vida… y eso que los quiero un montón.

Al menos Barsinson no ha aparecido todavía por allí. Bueno sí, el primer día que lo mandó su maestra para darme un recado.

-         Lenitita: Barsinson, que si te veo por el despacho, que sea para decirme “Hola maestra, qué tal estás”, ¿eh?

-         Barsinson: Sí, maestra.

Y me dio un beso antes de irse.

Mi J en cambio, ha venido tantas veces, que he perdido la cuenta. Yo por mi J lo di todo y lo intenté todo, pero no conseguí sacarlo adelante como a mí me hubiera gustado. El curso pasado (que ya no lo tenía yo), sé que fue de mal en peor y este año parece que va por los mismos pasos. El caso es que cuando hablo con él, parece que vamos a conseguir algo, pero al día siguiente, vuelven a traérmelo…

Temo que a mi J, el hecho de que me lo traigan al despacho, incluso le consuela, ya que me sigue viendo como a su maestra, la que lo cuidaba y lo protegía y con la que se sentía seguro y medio se comportaba, pero no termina de conectar con sus otros maestros y cada vez está más rebelde y desganado. Y cada vez se parece menos al J que yo conocía.

Y yo, sigo sin dar con la clave para ayudarlo y que salga adelante. Y por supuesto, tampoco tengo la solución que buscan los que me lo traen al despacho…

Igual todavía no hemos llegado a ver lo que tiene dentro este chaval.




viernes, 5 de octubre de 2012

Sin fronteras...




La próxima vez (si es que alguna otra vez se me presenta otra ocasión así), intentaré ser más espontánea y menos indecisa.

Es que todavía no entiendo cómo fui taaaaaan tonta…

¡Arrrrrggggghhhhhh!!!