Hoy es mi cumpleaños y, por más
años que cumpla, hay cosas que parece que no cambiaré, como mi poca constancia
en algunas cosas.
Me propuse no abandonar el blog y
este año está siendo un desastre, pues he faltado a mi fiel cita con la gala de los Oscars y con el Calendario Ekilikua. Me olvidé del cumple de mi blog y
tampoco recordé mis 15 años de maestra.
Pero aquí estoy para no
desaparecer del todo, porque me habría gustado contar todo lo que dejé en el
tintero y porque no quiero abandonar este espacio.
Los retos se van cumpliendo a
medias, pero no puedo quejarme. Mi sueño, ése que pensaba que no se cumpliría,
se cumplió el pasado día 10 cuando acudí como público a una conocida cadena de
televisión y estuve con él, con mi ídolo desde hace 28 años.
El encuentro con Eros sirvió para
darme cuenta de varias cosas:
- Que en
persona es un tío súper simpático y cercano, con lo cual, me gusta más que
antes.
- Que
gracias a su música, he conocido a gente maravillosa que comparte mi pasión por
él y con la que estoy viviendo momentos muy bonitos.
- Que como
él mismo canta, “si tú crees en tus sueños, podrán hacerse un día realidad”.
Así que seguiremos soñando,
“porque el tiempo te da ocasiones que muy lejos te llevarán…”