domingo, 8 de mayo de 2011

Uno más uno son siete (Parte I)





En Octubre de 2006, la Junta de Andalucía tuvo la brillante idea de realizar lo que se conoce como la “Evaluación de Diagnóstico”, para evaluar, mediante unas pruebas, a todos los alumnos de Andalucía de 5º de Primaria y 3º de ESO sobre las competencias básicas referidas a los cursos anteriores.

Aquello resultó un desastre, porque los críos todavía no se habían puesto las pilas con el nuevo curso y además, las pruebas eran muy largas y raras, porque estaban diseñadas con unos enunciados muy largos y a mitad de pregunta, los críos se habían perdido y no sabían muy bien lo que tenían que hacer.

Total, que decidieron cambiar los cursos y las fechas de las pruebas y hacerlas a los alumnos de 4º de Primaria y 2º de la ESO en el mes de mayo. También las hicieron un poco más cortas y un poco más fáciles. Sin embargo, estas pruebas siguen siendo una auténtica tortura, sobre todo para los maestros que tienen que pasarlas y los que tienen que corregirlas.

Este año yo soy tutora de 4º y me toca sufrirlas con mis críos, esos que nunca me escuchan y que hacen las cosas “a su manera”. Además, este año han incluido una prueba de Inglés. Sí, esa asignatura que llevo intentado impartirles durante tres años y que ellos se empeñan en hablar y jugar mientras tanto…

Mi relación con estas pruebas hasta la fecha, se había limitado a la parte de la corrección. Durante mi destierro albojense tuve que corregir gran parte de estas pruebas fuera de mi horario (en mi actual centro lo organizan de otra manera, menos mal), lo que me permitió hacer un dossier de las maravillas que allí encontré.

Así que inauguro hoy una nueva sección de lo que podríamos llamar “disparates escolares”.

Pregunta de Matemáticas: (El problema era más largo, pero lo acorté). Nuria y su familia se van a la playa de vacaciones. Allí alquilar una sombrilla cuesta 3,85 euros diarios, una silla 1,26 euros y una hamaca 2,08 euros. El alquiler del apartamento cuesta 975 euros al mes.
¿Cuánto pagarán por alquilar una sombrilla, dos sillas y una hamaca?




O sea, que para averiguar lo que cuesta la sombrilla y demás, necesito sumar lo del alquiler. Y lo que es peor: si a 975 euros le sumas 3,03 te da ¡¡¡12,78!!! Este es peor que mi casera de Aldeaquemada que me quería dar la tía 11 céntimos en lugar de 11 euros…




¡Uff! Que me digan dónde está esa playa en la que alquilar una sombrilla, dos sillas y una hamaca cuesta 25.350 euros para no ir. No quiero ni pensar lo que costarán unas cañitas en el chiringuito…


Vale, ésta, sencillamente, no la entiendo. Bueno, sí. El crío en cuestión se ha liado con los decimales y ha pasado olímpicamente de ellos, se ha dedicado a sumar por un lado el alquiler y la sombrilla (sin decimales) y por otro la silla y la hamaca (sin decimales también), y eso es todo. Muy imaginativo, pero seguimos sin saber cuánto cuesta lo que pedía el enunciado.




Creo que tengo una selección de unas 20 preguntas, así que le auguro una larga vida a esta sección. La pena es que no voy a poder hacer un dossier con las respuestas de mis críos, porque, conociéndoles, tienen que ser la caña. Lo bien que se lo van a pasar mis compis corrigiéndolas…


Y mientras yo, llevo varios días soñando con las dichosas pruebas...



4 comentarios:

Encarni Sáez dijo...

¡Mucho ánimo! Yo también tengo que sufrir parte de esas dichosas pruebas. Y para mí será la primera vez que las corrija. Puede que tenga que pasar alguna, de inglés, of course. En fin, al menos te echaste tus risas con las ocurrencias de los niños.

Saludos y buena semana ;)

En las nubes. dijo...

Mucho ánimo mi niña, un besazooo enormeeeeeeeeeeeeee, muakaaaaaaaaaaaa

Sonia dijo...

jeje es que los niños tienen que ser originales hasta para dar la respuesta.Eso debería contar también.Que te sea leve.Besos

Ana dijo...

Uno de los aspectos que no suelen medir los sistemas de evaluación es la creatividad de los niños y niñas, y si algo no les falta a los tuyos es imaginación y creatividad, mira qué diversidad de resultados: PENSAMIENTO DIVERGENTE, con mayúsculas, sí señor.

Reconozco que se pasa un mal rato, porque pensamos que de manera indirecta se evalúa también nuestro trabajo...y de paso hasta se cuestiona.

Ánimo, por lo menos te has librado de corregir.Yo no.